No siempre es recomendable hacer un restyling a tu marca, tienes que valorar muchos aspectos, pero si lo estás pensando es seguramente porque algo anda mal.
Se considera necesario en 3 principales ocasiones: cuando quieres hacer un relanzamiento de productos existentes, cuando quieres cambiar tu posicionamiento o cuando deseas ir a un nuevo mercado.
- Si quieres hacer un nuevo posicionamiento primero haz un análisis de la percepción que tienen tu clientes de tu marca, y revisa si ésta concuerda con tu mercado objetivo ideal. Si no concuerda puedes crear una estrategia para hacer un reposicionamiento tomando en cuenta el significado que quiere transmitir tu marca y los beneficios que ofrece.
- Adáptate a las necesidades del consumidor y a las tendencias de ese segmento, mantente actualizado y no te cierres a nuevas oportunidades de negocio,
- Procura que tus clientes se sientan parte de la marca, esto lo puedes hacer logrando que conecten contigo emocionalmente.
- Pide un feedback del consumidor, aunque a veces es difícil escuchar comentarios negativos, te aseguramos que estos son los que más nos van a ayudar.
- Si quieres hacer un relanzamiento de algún producto que se había manejado con anterioridad, dale un refresh, asegúrate de que tenga un valor extra y dalo a notar a tu mercado.
- Con base en lo anterior, re-diseña los elementos que contiene tu marca, los colores y la tipografía, de tal modo que concuerde con la imagen que quieres transmitir, nunca pierdas la honestidad.